En Epazoyucan, vecinos reportaron un grave problema: personas roban chinicuiles de magueyes en propiedades ajenas, dañando las plantas y causando pérdidas económicas a los dueños de los terrenos. Se pide a los propietarios afectados unirse para atrapar a los responsables y a los líderes comunitarios y autoridades municipales actuar al respecto. También se hace un llamado a los diputados locales para que se legisle en contra de esta actividad ilegal que perjudica a los productores de maguey y al medio ambiente. Los chinicuileros están causando daños graves, no solo a la planta, sino también al entorno en general. A pesar de los esfuerzos por reforestar magueyes, esta práctica ilegal sigue afectando la región. Es importante tomar medidas urgentes para detener esta situación y proteger tanto a los magueyes como a los dueños de los terrenos afectados. Hay que actuar de inmediato para evitar mayores daños y garantizar un ambiente seguro y sano para todos.
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